Cuando no invertir en una Startup

Las inversiones en Startup pueden ser una excelente oportunidad para aumentar ingresos, siempre y cuando se sigan ciertas recomendaciones

Tal y como indica el Infome Capital Riesgo en España 2019, el Capital Riesgo informal vuelve a superar los 100 millones y las 500 inversiones. La actividad inversora del Capital Riesgo Informal en 2018 destacó principalmente por su dinamismo y solidez, logrando nuevamente superar los €100 millones y 500 inversiones”  

En España, las empresas emergentes empezaron a tomar impulso sólo cinco años atrás, por lo que el sector todavía no ha entrado en fase de madurez (crecer a un ritmo del 20% anual demuestra que estamos ante un sector emergente).

Cada día es mayor el número de inversores que fijan su centro de atención en las startups como alternativa para colocar su dinero. Tal es así, que en 2018 más de 1.000 M de euros de invirtieron en startups. Es evidente que nos encontramos en una etapa de crecimiento tanto en número de startups invertidas como en el incremento del volumen de inversión en startups españolas.

 ¿Quién invierte en startups?

Aunque en este tipo de inversiones participan fondos de inversión, expertos en finanzas e inversores particulares, cada día son más las personas sin experiencia empresarial o financiera que se interesan por esta modalidad de inversión.

El tique de inversión para este tipo de operaciones (en Startups) oscila entre 5.000 euros y 450.000 euros. Por ejemplo, los fondos de inversión suelen protagonizar operaciones a partir de 100.000 euros. Los inversores, también conocidos como Business Angels, invierten entre 15.000 y 100.000 euros por Startup, según indica el Informe Business Angels 2019 del IESE.

Aspectos a considerar antes de invertir

  • La idea de negocio. A priori parece elemental detenerse en ella, pero con frecuencia no se reflexiona suficientemente sobre la bondad de ésta. La idea es el “corazón del proyecto”, pero ojo, la idea debe de ser monetizable. De nada sirve una gran idea si esta no genera en dinero y éste retorna al inversor.
  • Modelo de negocio escalable, recurrente y rentable. La Startup será más atractiva mientras más escalable sea su modelo de negocio, sus ingresos sean recurrentes y exista un margen operativo interesante y significativo en términos de EBITDA sobre Ventas.
  • Estado del negocio y capacidad de crecimiento. Es muy importante detenerse en conocer lo que se denomina “el estado del arte”, ¿en qué etapa de maduración se encuentra la idea de negocio? ¿qué tecnología necesita? ¿quién puede competir con nuestra idea de negocio? ¿qué barreras de entrada existen? ¿la demanda existe o hay que crearla? Son aspectos que influirán decisivamente en la bondad del negocio y sus posibilidades de crecimiento. La ausencia de competidores relevantes y la existencia de una demanda previsible creciente permitirá calificar la oportunidad de negocio de “atractiva” para el inversor. Más si es razonable que ésta pueda mantenerse a lo largo del tiempo.
  • Fundadores comprometidos y equipo motivado. Los integrantes del equipo deben de estar ilusionados y entregados al proyecto. Deben de dedicar todo su tiempo a la startup, mostrando que ésta es su prioridad y están convencidos de la bondad del negocio. Los inversores ponen la confianza en el emprendedor y en su equipo que son el motor del negocio.

    Si para las cuestiones planteadas las respuestas no son claramente positivas, mejor no invertir.