Los ángeles caídos del cielo para las Startups
Como dice Fred Wainwright, para muchos Business Angels, el aspecto emocional es el que les conduce a realizar inversiones: les encanta poder entrenar a otros y la emoción del rápido ritmo de crecimiento de la empresa.
¿Qué espera el Business Angel de la inversión realizada?
El Business Angel, cauto, suele diversificar sus inversiones tanto en valores admitidos a cotización como en acciones de empresas no cotizadas. En este último caso y al margen del aspecto emocional y filantrópico, se persigue la obtención de un beneficio.
Si un nuevo proyecto sale bien, en un plazo de cuatro a seis años, es muy probable que reciban una oferta de compra o de lanzamiento de las acciones en bolsa. En este último caso la rentabilidad estará asegurada con múltiplos considerables sobre la inversión realizada. Bien es cierto que de ella será partícipe el emprendedor pues de otra manera el objetivo de salir a bolsa sería inalcanzable.
En algunas extrañas ocasiones hemos visto como el Business Angel buscaba en el proyecto que financiaba una realización profesional personal y un afán de protagonismo impropio de la figura. En esas ocasiones el inversor actuaba más como “iluminado” que claramente había perdido el enfoque de su participación y a la larga haría fracasar el proyecto por una ambición personal fuera de lugar. Son casos raros pero existen.
El objetivo económico habitual es conseguir un múltiplo de la inversión realizada entre 3 y 5 veces en un plazo entre 5 y 8 años de media, lo que supone un 24,6% y 22,3% de rentabilidad (TIR) respectiva, dependiendo de la madurez del proyecto cuando el business angel realiza su inversión. Si bien, la inversión en proyectos denominados Start Up no suele superar el 10% de la cartera de un inversor tipo.
Retrato robot del Business Angel
Para entender sus objetivos, resulta de especial interés conocerles a la perfección. Según el diario Expansión, el retrato robot del Business Angel es el siguiente:
- Más de 45 años. La edad de los ‘busines angels’ ha ido en aumento en los últimos años, equiparándose a la de los inversores en EEUU. Actualmente, la mitad de los inversores se concentra en el tramo de edad de 45 a 54 años y un 22% es mayor de esa edad.
- Sexo masculino. El porcentaje de hombres es superior al 10%. Muchas mujeres se están incorporando a este colectivo pero todavía con inversiones menores.
- Perfil profesional. El 23% son altos directivos y el 8% son cuadros medios. El 18% son fundadores o CEO de otras ‘start up’, el 17% consultores y el 9% profesionales, como médicos o abogados.
- Experiencia limitada. La mayoría cuenta con un máximo de cinco años de experiencia. Sólo el 13% comenzó a invertir antes de 2002, frente al 20% en Estados Unidos. Esto puede deberse al continuo flujo de entrada de nuevos inversores, pero algunas voces también denuncian un cierto ‘amateurismo’.
Como vemos, los objetivos del ‘Business Angel’ están orientados a rentabilizar su inversión en el corto/ medio plazo (entre 5 y 8 años de media) pero también buscan otros aspectos cualitativos como son: el apoyo a las Start Ups, o la financiación a ciertos proyectos que son de afinidad para el inversor y que entienden tienen un gran potencial de crecimiento